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lunes, 20 de julio de 2020

Vuelta al pico Pacino 1965 metros, subida por el PR-HU91 y descenso por el sendero As Crampas


El Valle de Tena, es uno de los valles más extensos y poblados de los pirineos, con una superficie de unos 400 km². Altitudinalmente, va desde los 600 metros en las zonas bajas, hasta los 3144 metros del pico Balaitous o pico Moros, siendo la máxima elevación y el más prestigioso.

El acceso al valle, tiene lugar a la altura del estrecho de Santa Elena, llamado popularmente como “zoque”, que son los restos de una antigua morrena glaciar, hoy atravesado de Norte a Sur por uno de los principales afluentes del Ebro, el río Gállego, que nace a 2200 metros en el Col d'Aneu, en las proximidades del Portalet d'Aneou, que comunica el valle de Tena con su vecino francés, el valle de Ossau.

Su capitalidad, la ostenta la villa de Sallent de Gállego, que antiguamente y junto a Lanuza, conformaba el llamado Quiñón de Sallent, uno de los tres históricos territorios en los que se dividía administrativamente el valle, ubicada a orillas del embalse de Lanuza, sobre el que se eleva la Peña Foratata y al Sur, el pico Pacino, que pese a su modesta altitud (1965 metros), es uno de los mejores miradores no solo del valle de Tena, sino también de los valles circundantes, que en su cara Este tiene un precioso hayedo, el hayedo del Pacino.

Para la jornada de hoy, adaptándonos a la climatología, en compañía de Cosmín y Pablo, vamos a realizar una bonita circular al pico Pacino o Pazino, al que también ascenderemos, para disfrutar de este magnífico mirador e impregnarnos de la radiante vegetación que alberga en sus laderas.


La idea inicial era subir a la Punta Acuta por la senda de los Cazadores, pero dan tormentas por la tarde, así que busco un plan más corto que nos permita estar a la hora de comer en la furgoneta, eligiendo finalmente el pico Aspe desde el valle de Aisa. A última hora, se une al grupo Pablo, que comenta que se ha dejado las zapatillas en el pueblo, así que nuevo cambio de planes, subiremos al pico Pacino.

Como suele ser habitual cuando vamos al pirineo, quedamos en Villanueva de Gállego sobre las 7:30, tomamos un café y marchamos por la autovía Mudéjar hasta Sallent de Gállego, haciendo la clásica parada en La Nave, para comprar algo de repostería e incluso una pizza.

Próximos a Sallent de Gállego, dejamos la furgoneta en un apartadero que hay junto a las instalaciones de conservación de carreteras, porque la idea inicial es subir por el Camino As Crampas, cuyo inicio vemos completamente tapado por la vegetación, una vegetación húmeda debido a las tormentas del día anterior, que en cuanto caminemos por ellas nos van a calar hasta las partes nobles,
 por lo cual sobre la marcha, cambiamos de planes y subimos durante medio kilómetro por la carretera hacia el Portalet, tomando a mano izquierda un camino de tierra, en el que aparco la furgoneta. 

Para ser un día entre semana, el aparcamiento está concurrido, mientras preparamos las mochilas, nos fijamos en la bonita estampa que conforma la mole caliza de la Peña Foratata, para acto seguido, comenzar a caminar pasando junto a un panel informativo sobre la ascensión al pico Pacino, al cual nos dirigimos en suave ascenso por el Camino de la Selba, que va trazando largas lazadas, que nos permite descubrir emblemáticas montañas, como el Arriel o el Palas.

Dirección Sur, continuamos subiendo por un cómodo camino, en el que a medida que vamos ganando desnivel las vistas se van ampliando, deteniéndonos cada dos por tres para admirar la zona que va, desde el pico Musales hasta los picos del Infierno, en el que incluso vislumbramos el pico Terrabay, que ascendimos el verano pasado, dejando a mano izquierda las trazas de un sendero por el que a la vuelta cerramos la circular, con la mirada puesta ahora en las herbosas laderas del pico Pacino, en las que emerge a modo de faro, la torre de descompresión.

Unos metros más adelante, tomando de referencia las marcas blancas y amarillas del PR-HU91, abandonamos
 el Camino de la Selba, por el que podríamos seguir para atravesar de forma más directa la Plana de la Selva, pero preferimos ir a lo seguro ya que Pablo va con zapatillas de asfalto y con lo húmedo que está todo, no creo que agarren mucho, así que poco a poco continuamos avanzando por el camino, que rápidamente se transforma en un bonito sendero, por el que atravesamos una extensa pradera repleta de flores, en las que pasta el ganado, atentos a nuestros movimientos.

Mientras preparamos las mochilas, nos fijamos en la bonita estampa de la Peña Foratata
Para acto seguido, comenzar a caminar pasando junto a un panel informativo, sobre la ascensión al pico Pacino
Al cual nos dirigimos en suave ascenso por el Camino de la Selba
Que va trazando largas lazadas, que nos permiten descubrir emblemáticas montañas, como el Arriel o el Palas
Dirección Sur, continuamos subiendo por un cómodo camino, en el que a medida que vamos ganando desnivel
Las vistas se van ampliando hacia la zona que va desde el pico Musales hasta los picos del Infierno
Pasando junto a las trazas de un sendero, por el que más tarde cerraremos la circular
Con la mirada puesta 
En las herbosas laderas del pico Pacino, en el que emerge a modo de faro, la torre de descompresión
Unos metros más adelante, abandonamos el Camino de la Selva, para seguir por el PR-HU91
Que rápidamente se transforma en un sendero, por el que atravesamos una extensa pradera
Repleta de flores (Campanula scheuchzeri)
En las que pasta el ganado
Atentos a nuestros movimientos

Sobre la cota 1500 metros, el sendero nos introduce en el precioso hayedo del Pacino, más conocida como la Selba de Sallent (A Selba Sallén), donde la humedad se hace latente, no solo en los árboles sino también en el sendero, que debido a las continuas lluvias se encuentra embarrado, aunque no siempre es oro todo lo que reluce y en este caso barro, ya que alguno acaba metiendo la zapatilla hasta dentro, en una “mina animal", con las consabidas risas del resto. 

Al tratarse de una pequeña mancha (±35 hectáreas), vamos alternando tramos de bosque con otros a cielo abierto, pasando junto a la torre de descompresión de aguas, perteneciente a la conducción que conecta el embalse de Escarra con la estación hidroeléctrica de Sallent de Gállego, que veremos al finalizar el recorrido cuando bajemos a tomar una cerveza, pero de momento, continuamos subiendo por un precioso sendero que va trazando una sucesión de lazadas, que nos permiten ir disfrutando de las vistas, en el que se van añadiendo viejos conocidos como el Peyreget o el Midi d'Ossau. 

Aprovechando al máximo la sombra que nos ofrecen las hayas, poco a poco vamos ganando desnivel, hasta tener visible el collado y la cima del Pacino, donde salimos definitivamente a cielo abierto, deteniéndonos un instante para observar el vuelo de un buitre sobre el embalse de Lanuza, mientras en el fondo del valle va quedando la torre de descompresión, formando una bonita postal con la Peña Foratata y los picos Arriel, Palas, además del Musales.

Sobre la cota 1500 metros, el sendero nos introduce
En la Selba de Sallent (A Selba Sallén), un precioso hayedo
Donde la humedad se hace latente, en los árboles y en el sendero en forma de barro
Aunque no es oro todo lo que reluce y en este caso barro, pisando alguno una "mina animal"
Como se trata de una mancha (±35 hectáreas), vamos alternando tramos de bosque con zonas de claros
Pasando cerca de la torre de descompresión, que conecta el embalse de Escarra con la central hidroeléctrica de Sallent
Que veremos a la vuelta, pero de momento, continuamos subiendo por el sendero que va trazando lazadas
Disfrutando de las vistas, que se van ampliando hacia el Peyreget y el Midi d'Ossau
Aprovechando la sombra de las hayas
Poco a poco vamos ganando desnivel
Hasta tener visible el pico Pacino, donde salimos definitivamente a cielo abierto
Deteniéndonos un instante para observar
El vuelo de un buitre
Sobre el embalse de Lanuza, mientras abajo va quedando
La torre de compresión, que forma una bonita estampa con la Peña Foratata, además de los picos Arriel, Pala y Musales

Tras una última lazada, acometemos finalmente el último tramo hasta el collado del Pacino, al que nos vamos acercando por un terreno de falso llano, salpicado de bojes, mientras a nuestra espalda se va haciendo más visible el Midi d'Ossau, pero hoy la montaña elegida es la que tenemos frente a nosotros, el pico Pacino, que desde está perspectiva ofrece una preciosa pala herborea, realzada cuando la iluminan los rayos del sol.

Tras hora y cuarto, alcanzamos la encrucijada de senderos que es el collado del Pacino, en el que aprovechamos para descansar mientras observamos como al Oeste se abren unas nuevas panorámicas, en este caso del embalse de Escarra, con la magnífica barrera natural que conforma la sierra de la Partacua, que separa el valle de Tena de la Tierra de Biescas, cuyo máximo exponente es la Peña Telera (2762 m), aunque no la más elevada, ya que ese privilegio recae en la Peña Retona (2781 m), que más tarde disfrutaremos cuando vayamos rodeando las laderas del Pacino, aunque ahora lo que nos atañe es llegar hasta su cima.

Así que tras recoger todo, seguimos avanzando por un camino trazado sobre la hierba, que da paso a un bonito sendero que nos lleva por el cordal hasta la base de la montaña, donde comienza a dibujar una sucesión de cortas lazadas, que permiten suavizar la fuerte pendiente que tiene la parte final de la ascensión, amenizada sin duda por las preciosas vistas que tenemos en todas direcciones, alcanzando una primera cota secundaria, que ofrece un espectacular skiline hacia las Tierra de Biescas.

Como cada uno ha subido a su bola, nos reagrupamos en la antecima, después, bajamos a un pequeño collado donde remontamos los últimos metros, hasta llegar a la concurrida cima del pico Pacino, en la que sopla una brisa algo desagradable, por lo que nos ponemos el cortavientos, para acto seguido hacer un largo descanso para comer

Las vistas desde este mirador natural son de 360º; al Norte con el Midi d'Ossau, Peña Foratata, Arriel, Palas, Anayet y Vértice del Anayet; hacia el Sur, en un primer plano del Cachinio o Peña del Solano y el entorno de Panticosa (pico Mallarruego, Peña Otal, Tendeñera, Peña Sabocos y Peña Roya): al Este, del macizo de Argualas, además de los picos del Infierno, Piedrafita y Terrabay; y al Oeste, la sierra de la Partacua (Peña Telera, el Pabellón, Peña Retona), también de la zona de Collarada (Somola Alto y Collarada).

Tras una última lazada, acometemos el último tramo
Hasta el collado del Pacino, por un terreno de falso llano, salpicado de bojes
Mientras a nuestra espalda se va haciendo más visible, el Midi d'Ossau
Pero hoy la montaña elegida es el pico Pacino, que desde está perspectiva ofrece una bonita pala herborea
Después de hora y cuarto, alcanzamos el collado del Pacino, encrucijada de senderos
Y buen mirador hacia el Oeste, del embalse de Escarra con la sierra de Partacua de fondo
Luego, continuamos avanzando por un camino trazado sobre la hierva
Que da paso a un bonito sendero por el que llegamos hasta la base de la montaña
Donde el sendero comienza a realizar una sucesión de cortas lazadas, que mitigan el esfuerzo
Hasta llegar a una cota secundaria marcada con un hito
Que nos ofrece un espectacular skiline hacia las Tierra de Biescas
Después, bajamos hasta un collado, donde remontamos los últimos metros hasta llegar a la cima del pico Pacino
Un mirador natural hacia el Norte del Midi d'Ossau, Peña Foratata ...
Al Sur del Cachinio o Peña del Solano (abajo) y la zona de Panticosa
Con la Punta Piniecho, el pico Mallarruego o Tendeñera
Hacia el Este, del macizo de Argualas, además de los picos del Infierno, Piedrafita y Terrabay
Y al Oeste, la Punta Cochata (abajo), la sierra de la Partacua e incluso parte de Collarada (Somola Alto y Collarada)

Permanecemos media hora en la cima, cada vez sube más gente, así que recogemos todo e iniciamos el descenso hacia el collado del Pacino, regresando sobre nuestros pasos extasiados con tan magníficas vistas. Justo cuando llegamos a la base de la montaña, en vez de llegar hasta el collado, bajamos de forma directa por un herboso sendero apenas perceptible, por el que enlazamos con el PR-HU91, que trazando continuas lazadas nos conduce hacia el embalse de Escarra, con la sierra de Partacua de fondo..

Siguiendo el sendero, vamos atentos al paisaje, un paisaje totalmente opuesto al que hemos disfrutado en la subida, donde el bosque y las zonas de pastos de la cara Norte, dan paso a la vegetación arbustiva de la cara Sur, compuesta principalmente por hermosos mantos de piornos en flor, salpicados con algunos rosales silvestres, que dan la nota de color a la solana, que a pesar de ser verano, hoy estamos disfrutando de una mañana bastante agradable, con una temperatura que no supera los 25º, algo que siempre se agradece.

A medida que vamos perdiendo desnivel, aparecen ante nosotros otras montañas de menor relevancia como la Punta del Cantero y la Punta Cochata, que se alzan varios centenares de metros por encima de las aguas del río Escarra, que desde aquí se intuye pero no vemos, aunque ahora descendemos fijándonos en el propio sendero, que suavemente y con buen firme nos conduce hacia el embalse de Escarra, rodeado de una pista por la que discurre la ruta 4 "Vuelta al Pacino", del Espacio BTT Alto Gállego que llevamos en mente realizar, lo que nos permite tener una idea del tramo más complicado de todo el recorrido, que va desde el embalse de Escarra hasta el collado del Pacino, que si bien no tiene una fuerte pendiente, tiene su miga, aunque siempre nos queda la opción de empujar.

Cerca de la presa del embalse (cota ±1700 metros), pasamos junto a una gran roca utilizada para colocar varias señales del recorrido, donde echamos una mirada atrás para obtener una perspectiva diferente a la habitual del pico Pacino, para acto seguido, comenzar un largo flanqueo hacia el Este, vadeando un pequeño arroyo que apenas lleva caudal, hasta alcanzar un cruce de senderos perfectamente identificado, donde la ruta 4 y el PR-HU91 se distancian, bajando el primero de ellos de forma directa hacia el embalse de Escarra.

Permanecemos media hora en la cima, recogemos todo e iniciamos el descenso
Hacia el collado del Pacino, regresando sobre nuestros pasos, extasiados con las vistas
Justo cuando llegamos a la base de la montaña, en vez de seguir hasta el collado
Tomamos un sendero casi imperceptible 
Por el que enlazamos con el PR-HU91, que trazando continuas lazadas
Nos conduce hacia el embalse de Escarra, donde observamos como el bosque de la cara Norte
Da paso a la solana de la cara Sur, compuesta por piornos en flor
Y rosales silvestres, que ponen la nota de color
A medida que vamos perdiendo desnivel, aparecen otras montañas como la Punta del Cantero y la Punta Cochata
Cerca de la presa del embalse, pasamos junto a una gran roca
En la que echamos una mirada atrás, para contemplar una perspectiva diferente del pico Pacino
Para acto seguido, iniciar un largo flanqueo hacia el Este, vadeando un arroyo
Disfrutando de las vistas
Hasta alcanzar una bifurcación, donde la ruta 4 desciende hacia el embalse de Escarra

Antes de seguir, echamos una mirada a la sierra de la Partacua o Partagua, cuyo nombre también es la denominación histórica de uno de los tres quiñones en los que se dividía geográfica y administrativamente el valle de Tena, que era algo habitual entre los siglos XVI al XVIII, especialmente en valles y territorios de montaña con abundancia de pastos

En este lugar, continuamos por el PR-HU91 por un bonito sendero comido por la vegetación, donde se notan los dos meses de confinamiento además de las lluvias, ya que en algunos tramos es imperceptible aunque lógico, por lo que avanzamos más lento de lo esperado disfrutando de la espectacular garganta que recorre el río Escarra, en el que se forman bonitas pozas con las que nos deleitamos la vista y el gusto, con las fresas silvestres que vamos recolectando.

Poco a poco, vamos dando la vuelta a la montaña, las vistas hacia la zona de Panticosa se van ampliando; el Mondarruego se hace más visible junto con Peña Roya y más lejano el Oturia, mientras a nuestra espalda tan solo despuntan sobre las laderas del Pacino, la Punta Cochata y la Peña Telera, en tanto comprobamos como vamos cambiando de vertiente, caminando por un sendero ahora más nítido, donde el matorral de la cara Sur va dando paso a un bosquete de bojes salpicados con algunos abetos, situado sobre las laderas meridionales del Cachino o Peña del Solano, donde aprovechamos sus ramas como marco natural para fotografiar la Punta del Cantero.

Unos metros más adelante, llegamos a la estribaciones de la Selba de Lanuza, donde tenemos la posibilidad de bajar por senda a Escarrilla, por el “Camino de los Forzados”, que recibe este nombre por ser usada por los presos políticos que trabajaron en la construcción de la presa de Escarra, o continuar hacia Sallent de Gállego siguiendo el PR-HU91, que es el ramal que debemos seguir para completar la circular, aunque hace tiempo que le tengo echado el ojo a esa alternativa desde Escarrilla, aunque hoy no es el día.

Aquí, enlazamos con el sendero As Crampas por el que nos internamos en la espectacular Selba de Lanuza, una mancha de bosque compuesta principalmente por hayas, abetos y bojes, que ofrecen una buena sombra, en la que disfrutamos en los claros de unas bonitas vistas a nuestra espalda de parte del circo del Ip (Collarada y Pala de Ip), mientras al frente obtenemos un magnifico skiline de las Tierras de Biescas, en el que conseguimos distinguir gracias a las antenas que pueblan su cima, el Puntal del Mallo.

En este lugar, continuamos por el PR-HU91, por un bonito sendero
Comido por la vegetación
Disfrutando de la espectacular garganta que recorre el río Escarra en este tramo
Formando bonitas pozas con las que nos deleitamos la vista
Y el gusto, con la fresas silvestres que vamos recolectando
Poco a poco, vamos dando la vuelta a la montaña, el sendero se hace más nítido
Y las vistas hacia la zona de Panticosa, con Peña Roya y al fondo el Oturia
Mientras a nuestra espalda elevándose por encima de las laderas del Pacino, la Punta Cochata y la Peña Telera
En tanto comprobamos, como el matorral bajo de la cara Sur va dando paso a un bosquete
De bojes y abetos, situados en sobre las laderas meridionales del Cachino o la Punta del Solano
Aprovechando las ramas como marco natural, para fotografiar la Punta del Cantero
Unos metros más adelante, llegamos a las estribaciones de la Selba de Lazuna
Donde podemos bajar a Escarrilla por el "Camino de los Forzados" o seguir hacia Sallent por el PR-HU91
Que es la opción elegida para cerrar la circular, siguiendo el sendero As Crampas
Por el que nos adentrándonos en la Selba de Lanuza, una mancha de bosque compuesta por hayas, abetos y bojes
Donde aprovechamos los claros, para disfrutar de las vistas
A nuestra espalda de parte del circo de Ip (Collarada y Pala de Ip)
Y un magnífico skiline de las Tierras de Biescas, donde distinguimos por las antenas, el Puntal del Mayo

A medida que el día va avanzando, el calor se hace más notable, la vegetación tampoco ayuda ya que hayas y abetos dan paso a un muro natural de bojes, por el que iniciamos el descenso por un bonito sendero que va culebreando por la ladera Este del Cachino, hasta desembocar en una zona de pastos, en el que a cada paso el panorama se va ampliando, donde a la sierra de Tendeñera (Punta Piniecho y pico Mondarruego) se le suma el macizo de Argualas y en el fondo del valle, la bella población de Lanuza, situada junto al embalse que le da nombre. 

Tomando de referencia las marcas blancas y amarillas del PR-HU91, seguimos caminando a media ladera, hacia la forma de proa que tiene la cima del pico Pacino desde está perspectiva, atravesando una extensa zona de pastos desde la que disfrutamos de las vistas de la Peña Foratata, bordeando la selba de Sallent en la que nos introducimos tras un suave descenso, alternando preciosos tramos de bosque con otros a cielo abierto, que nos sitúan bajo los paredones del pico Pacino.

Unos metros más adelante, observamos en el tronco de un haya un cartel que indica ·”Chimenea”, acompañado de unas marcas blancas y azules, que entendemos seguirán rodeando el pico Pacino, ya que según indica el mapa del GPS, el PR-HU91 desciende hacia Sallent de Gállego.

A medida que avanzamos, el calor se hace notable, las hayas y abetos dan paso a un muro de bojes
Por el que iniciamos el descenso por un bonito sendero 
Que va culebreando por la ladera Este del Cachino
Donde a cada paso las vistas se van ampliando, donde a la sierra Tendeñera (Punta Piniecho y pico Mallarruego)
Se le suman el macizo de Argualas
Y en el fondo del valle, la población de Lanuza
Tomando de referencia las marcas blancas y amarillas del PR-HU91, seguimos avanzando a media ladera
Atravesando una zona de pastos, con vistas a la Peña Foratata
Bordeando la selba de Sallent 
En la que nos introducimos en suave ascenso
Alternando preciosos tramos de bosque
Con otros a cielo abierto
Pasando junto a los paredones del pico Pacino
Unos metros más adelante, en el tronco de un haya, vemos un cartel que indica "Chimenea"

Como nuestra idea es trazar una circular que nos lleve al punto de partida sin pisar la carretera, decidimos seguir las marcas blancas y azules, que nos sacan a una zona de prado, en la que hay una pequeña mancha de bosque, donde el sendero está completamente embarrado, lo que nos obliga a buscarnos en muchos tramos la vida, retrasando nuestro avance.

Superado este pequeño contratiempo, dejamos atrás definitivamente el bosque, para continuar caminando por una extensa campa, pasando por debajo de una cerca que rompe un precioso muro en piedra seca, que impide que el ganado campe a sus anchas, mientras a lo lejos además del Peyreget, el Midi d'Ossau o toda la sucesión de montañas que van desde la Peña Foratata hasta el pico Terrabay, ya podemos ver como emerge la torre de descompresión del embalse de Escarra, que nos sirve para calcular la distancia que nos separa del aparcamiento, hasta alcanzar la Plana del Betato, en la que sigue pastando el ganado atento a nuestros movimientos. 

Nosotros nos limitamos a fotografiarlo desde la distancia y echar un vistazo al valle, donde todavía podemos ver la bella población de Lanuza, que se vio obligada al despoblamiento por la construcción del embalse y que ha sido rehabilitada por sus antiguos moradores en la década de los 90, cuyo nombre proviene del celta latinizado landa o lana, que significa “ladera” cuyo embalse recoge las cristalinas agua del río Gállego (menuda diferencia de cuando pasa por Zaragoza),

Cuando estamos casi a la altura con Sallent de Gállego, comenzamos a descender dejando a mano derecha el sendero de As Crampas, que desciende de forma directa a la carretera, mientras nosotros continuamos siguiendo otro sendero que en este tramo se pierde en algunos puntos, pero con paciencia conseguimos localizar, aprovechando estos momentos para admirar en paisaje entre los pinchudos rosales silvestres, vadeando el cauce de un arroyo en el que aprovecho para limpiar las zapatillas, que he metido de lleno en otra "mina animal".

Tras unas cuantas lazadas, nos introducimos de forma breve en el bosque, hasta desembocar en la Plana del Bico, una pradera donde los pastos están más alto de lo habitual, donde el sendero se difumina aunque por intuición sabemos que debemos avanzar lo más rectos posible (Noroeste), enlazando con el Camino de la Selba, cerrando está bonita circular.

Ahora, tan solo nos queda retroceder sobre nuestros pasos, disfrutando de la bonita estampa que conforma la Peña Foratata, hasta que después de cuatro horas y media, llegamos al aparcamiento en el que recogemos para marchamos hasta Sallent de Gállego, donde compramos una cervezas para acompañar el bocadillo, que comemos a orillas del río Aguas Limpias y vuelta a Zaragoza. Cerca de Zuera, nos cae el diluvio universal, está vez si, que han acertado los meteorólogos!.

Como nuestra idea es trazar un circular sin pisar asfalto, continuamos siguiendo las marcas blancas y azules
Que nos introducen por última vez en el bosque, donde el sendero está completamente embarrado
Superado este pequeño contratiempo, salimos definitivamente a campo abierto
Atravesando una extensa campa
Cerrada por un muro en piedra seca, que cruzamos pasando bajo la alambrada
Mientras disfrutamos de una amplia panorámica
En el que emerge la torre de descompresión, que nos sirve para calcular cuanto nos queda
Unos metros más adelante, alcanzamos la Plana del Betato, en la que pasta el ganado
Atentos a nuestros pasos
Mientras en el fondo del valle, todavía podemos ver la bella población de Lanuza
Cuando estamos a la altura de Sallent de Gállego, comenzamos a descender dejando el sendero As Crampas
Para seguir por otro sendero, aprovechando los rosales silvestres para fotografiar el entorno
Tras unas cuantas lazadas, nos metemos un instante en el bosque
Hasta desembocar en la Plana del Bico, donde los pastos están más altos de lo habitual, difuminando el sendero
Aunque es fácil guiarse, enlazando finalmente con el Camino de la Selba
Donde regresamos sobre nuestros pasos hasta el aparcamiento

16 comentarios:

  1. Hola Eduardo...
    La verdad es que,es todo un privilegio tener ese fantástico Valle de Tena(que aun no conozco,pero todo se andará)a poco menos de dos horitas de casa.
    Muy buena ruta la que nos has mostrado subiendo "Al Pacino"(muy buen actor por cierto...jejeje).
    Con esos cerca de dos mil metros,la verdad es que el Pacino ofrece unas vistas impresionantes de ese Valle de Tena,aunque también me han gustado mucho las partes de sendero y bosque,sobre todo esa Selba de Sallent.Muy "coqueto" ese pueblo de Lanuza a orillas del Embalse.
    Una interesante ruta sin dificultad.

    Saludos.

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    1. Hola Juane.

      Si, es el valle que más cerca tenemos y por eso es al que más veces vamos, aunque la zona de la Jacetanía más o menos está a igual distancia.

      Este pico, lo que ofrece son unas buenas panorámicas, tanto en la subida como desde la cima y sin realizar un gran esfuerzo, además casi el 100% por sendero.

      Lanuza es un pueblo pequeño pero muy coqueto y al que le gusta la música, para el verano en pirineos Sur, es una buena ocasión para matar dos pájaros de un tiro.

      Un saludo

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  2. Hola Eduardo.

    Que maravilla de frondosidad y que buen mirador es el monte de Al Pacino. Ya solo con ese vista del embalse y el murallón petreo de la Partacua al fondo merece la pena la subida.

    Cuanto echamos de menos los Pirineos por aquí abajo, ya que este mes de agosto haremos una pequeña escapada a los Picos de Europa.

    Un saludo.

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    1. Hola Toni.

      Si, es una ascensión que con muy poco esfuerzo, te recompensa con unas vistas tremendas, en el que sin duda destaca el embalse de Escara con la sierra de la Partacua.

      Nosotros por suerte los tenemos cerca, ya hemos ido algún día y la semana que viene, iremos otra vez, eso si, este año salvo algo inesperado, nos quedamos sin vacaciones, no me importaría ir unos días a Picos de Europa, aún no los conozco.

      Un saludo

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  3. Aupa Eduardo. Que gratos recuerdos me trae esa bajada que hicisteis del Pacino.. lo que no sabia es que se podia hacer circular para volver hacia Sallent. Me la apunto jeje y para un dia sin mucho que hacer una carrerilla por alla pinta guay.

    Buen finde =)

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    1. Hola Oscar.

      Si está subida del Pacino, tiene bastantes variantes y algunas, permiten hacer una circular bien maja, como está que hicimos y que es perfecta para correr, ya que a nada que estés un poco en forma, se puede hacer casi toda corriendo y encima por sendero.

      Un saludo

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  4. Sin duda un gran recorrido alrededor de este fantástico mirador del Valle de Tena.

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    1. Hola Ángel.

      Si sencilla, en el que las vistas sin duda y el entorno por el que se desarrolla, le da un plus.

      Un saludo

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  5. Hola Eduardo,

    Menudo "paseo" para un día entre semana, que gozada tener el Valle de Tena tan cerca, toda la zona es impresionante, con brutales moles de roca, hayedos, arroyos y lagos.

    Salud y montaña.

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    1. Hola David.

      Si, hemos tenido fiesta algunos viernes y los hemos aprovechado, para ir en el día al pirineo, que está menos frecuentado.

      Está sencilla ascensión, tiene todo lo que a la mayoría nos gusta, buenos bosques y mejores vistas.

      Un saludo

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  6. Desde luego, con las semanas que llevo, de buena gana me aventuraría por cualquier sendero pirenaico amparado por el frescor de umbrías calizas y frondosos bosques.
    Es una buena válvula de escape poder caminar frente a la pantalla por la senda que nos brindas. Menudo desahogo.

    Está claro que hay que madrugar, de lo contrario, los de delante te recolectan las fresas silvestres antes de que llegues.
    Saludos.

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    1. Hola Javier.

      Me alegro que estas entradas te valgan como válvula de escape, creo que nos pasa a muchos, ya que por lo menos no podemos salir o irnos de vacaciones, ver este tipo de publicaciones nos alegra el rato.

      Sin duda madrugar tiene sus ventajas, buenas temperaturas, menos gente y coger más fresas silvestres, aunque para esto último hay que tener también buen ojo, porque muchos pasaran y ni cuentan se darán.

      Un saludo

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  7. Hola Eduardo:

    El Pacino... es una bendición para todos aquellos que nos gusta caminar por la montaña. No es una montaña que destaque por su gran altura, pero si destaca por su maravillosas y priviligiadas panorámicas, vistas de 360º.

    Sé de muy buena tinta que es una montaña que todo aquel que ha coronado su cima, no la olvida y como no podía ser de otra manera, nosotros la tenemos en nuestra agenda, así que algún día caerá.

    Un saludo compañero.

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    1. Hola Eulogio.

      Es sin duda uno de los mejores miradores del valle de Tena y circundantes. Ascensión sencilla, preciosa, que se puede adaptar al gusto de todos, yo sin duda la recomiendo.

      Un saludo

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  8. Hola Eduardo,

    Sin duda el Valle de Tena está repleto de lugares espectaculares y fascinantes, especialmente con esas gigantescas moles rocosas. Pero también sus bosques, lagos, etc. Es una zona que poco a poco voy descubriendo y El Pacino parece una propuesta muy interesante, al menos, en cuanto a vistas sobre los alrededores de este impresionante valle.

    ¡Salud y montaña! :)

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    1. Hola Guillem.

      Todo valle tiene su encanto y el de Tena, ofrece todo lo que comentas. Sin duda, el Pacino es una buena opción, para disfrutar de las vistas de este valle y los que colindan, eso si, conviene madrugar porque es una montaña muy frecuentada.

      Un saludo

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